lunes, mayo 23

Una sonrisa no cuesta.

Una sonrisa no cuesta nada,
y en cambio... ¡Cuánto da!
Enriquece a quien la recibe sin empobrecer a quien la da.
Una sonrisa es cosa de un momento, y sin embargo casi siempre perdura en la memoria.
Nadie que no sea tan rico ni poderoso que pueda pasearse sin una sonrisa, y nadie es tan pobre que no pueda ser enriquecido asimismo con una sonrisa.
Crea y protege la buena suerte en la vida y enseña la más preciada amistad.
Brinda descanso al fatigado, entusiasmo al abatido, alegría el triste, y es el antídoto natural mejor que existe contra las dificultades.
Sin embargo, la sonrisa es algo que no puede ser comprado, mendigado, ni tampoco se puede pedir como préstamo, porque es un don que no tiene valor, sino hasta el momento en que se prodiga espontáneamente

No hay comentarios:

Publicar un comentario